Hay algo que no nos gusta de LinkedIn.
No nos gusta porque invade nuestra privacidad, huele a spam, sentimos que no hay un interés real detrás y que han abusado del hecho de dejarles entrar a nuestra red de contactos.
Si sólo mostraran lo contrario a lo que describo, los recibiríamos con interés y curiosidad. Sería, inclusive, una oportunidad para negocios.
Ya sabes que me refiero a ciertos mensajes vendedores que llegan a nuestro buzón interno o Inmail.
La paradoja está en que no podemos prescindir de ellos porque son la puerta a oportunidades para todos.
La tasa de apertura de Inmails bien elaborados llega hasta del 50% -según Sales Solutions de LinkedIn- frente al 20% o menos del email, por ejemplo.
Pero los usuarios los estamos matando.
Por eso, si estás en el lado de quién los envía, Social Selling y Sales Navigator Empresarial queremos compartir las mejores prácticas que han dado excelentes resultados.
Así tus Inmail y los de tu equipo van a resaltar de los de los demás, mostraran genuino interés y habrás logrado arrancar conversaciones relevantes con las personas correctas.
Uno de los secretos mejor guardados de LinkedIn son sus #Inmail. Quizá porque no se usan bien o se confunden con un discurso vendedor. Algo que la odiamos en #LinkedIn.
Sin embargo, son el medio natural para atraer conversaciones de #ventas.
Los InMail están destinados a ser un método introductorio para animar a tu prospecto a futuras conversaciones. ¡Úsalos para causar una primera gran impresión!
Para ayudarte en este arte y que aumentes tus CONVERSACIONES con potenciales clientes, te dejamos unas ideas.
¡Redacta mensajes poderosos!